“Tengo un avión, tengo un barco, tengo una gran casa, tengo una gran familia. De hecho, tengo todo lo que siempre he querido. Y me siento genial”. Phil Hartman le explicaba así al director de la última película que hizo, Joe Dante, cómo era estar en la cima de su vida y de su carrera. No era para menos. Era 1998 y protagonizaba su propia telecomedia, Newsradio, doblaba a varios de los personajes más populares en la serie de moda (Los Simpson) y el cine por fin empezaba a darle papeles secundarios en los que lucir su carismática bajeza moral. Pero tras aquella película (Pequeños guerreros) no habría más: Hartman murió asesinado por su esposa un mes antes de su estreno.
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https://elpais.com/elpais/2018/07/10/icon/1531240607_595885.html