Una ardilla podría atravesar la cultura de la década de los 2010 saltando de noticia en noticia de Taylor Swift. Ella empezó el decenio como niña prodigio y lo termina, cumpliendo hoy 30 años, como la estrella más poderosa del planeta. Swift ha demostrado una intuición incomparable para mudar la piel antes de que empiece a calcificarse, mutando de adolescente repipi en devora-hombres, princesa del pueblo, serpiente, jefa, víctima, villana, heroína, marioneta o controladora de marionetas. Algunos de estos roles no fueron idea suya, no siempre ha estado en control de su imagen, pero el relato de Taylor Swift ha sido el de empezar como Dorothy, convertirse en la Bruja Malvada del Este y acabar como el Mago de Oz. Este mundo es suyo, nosotros solo somos los munchkins.
[seguir leyendo]
https://www.revistavanityfair.es/cultura/entretenimiento/articulos/taylor-swift-1/42296