Antes de ser una estrella Macaulay Culkin compartía habitación con sus seis hermanos. Después de ganar 45 millones de euros en cinco años, su padre le seguía obligando a dormir en el sofá de su propia mansión para que no se le subiese la fama a la cabeza. Hoy se cumplen 25 años de Niño rico (1994), su jubilación con 14 años. Con esa edad, Culkin, la mayor estrella infantil de la historia de Hollywood junto con Shirley Temple, se emancipó legalmente de sus padres, nombró a su contable como tutor jurídico y no ha vuelto a hablarse con su padre. Desde entonces, han corrido ríos de tinta sobre esta turbulenta relación familiar. Aunque durante los últimos años ha sido el propio Culkin quien se ha pronunciado –principalmente en una entrevista concedida en 2018 al podcast estadounidense WTF–, los relatos se remontan a mediados de los noventa y al tempestuoso divorcio de los padres del actor.
[seguir leyendo]
https://elpais.com/elpais/2019/12/18/icon/1576664696_164273.html