No puede ser casualidad que Freddie Mercury y Mary Poppins hayan regresado a nuestras vidas a la vez. A través de sus películas, Bohemian Rhapsody y El regreso de Mary Poppins, han resurgido como dos agentes de la nostalgia para revalidar su lugar en la memoria sentimental del pueblo: la última vez que vimos a la niñera más famosa del cine prometió que volvería cuando los vientos arrecien más fuerte. Pues ahora la sociedad está en plena borrasca. ¿Su misión? Salvar a todo el que se cruce en su camino. ¿De qué? Probablemente de sí mismos. ¿Su estrategia? Desarmar el cinismo mediante un subidón de azúcar, un vestuario extravagante y un montón de canciones pegadizas.
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https://elpais.com/elpais/2018/12/19/icon/1545231514_104351.html